
La moda urbana, también conocida como streetwear, ha experimentado un increíble cambio a lo largo de la historia. Desde sus comienzos en las décadas de 1970 y 1980, donde los jóvenes de barrios como Nueva York y Los Ángeles, adoptaron la moda callejera como una forma de expresar su identidad y resistencia. Estos jóvenes pertenecían a comunidades afroamericanas e hispanas, y la ropa callejera se convirtió en una manifestación de su cultura y un estilo de vida para ellos.
Actualmente se ha convertido en algo muy habitual en el día a día de los jóvenes.


Pero ¿cómo surgió esto?
Tenemos que volver a los años 80 para conocer el comienzo de ese estilo que cambió por completo cómo nos vestimos y que definimos como “ropa de calle”. Todo empezó en Los Ángeles, en una época en la que el surf y el skate eran muy populares. Un surfista de la costa oeste llamado Shawn Stussy fue el pionero. Creó camisetas y sudaderas con su propia marca, las cuales tuvieron más éxito que sus tablas de surf. Esto marcó el inicio de un modo diferente de vestir, que luego se extendió a otras subculturas como el hip hop y la música electrónica. Las estrellas principales de estos géneros empezaron a usar cada vez más sudaderas, camisetas, pantalones y zapatillas deportivas con un toque más urbano.
El siguiente paso importante vino de la mano de los deportistas y su fama global, especialmente después de los Juegos Olímpicos de Barcelona ’92 y, sobre todo, con el Dream Team, el famoso equipo de baloncesto de Estados Unidos liderado por Michael Jordan.
Los inicios de la rebeldía:


En las décadas de 1970 y 1980, la moda urbana comenzó como una expresión de rebeldía juvenil. Marcas como Adidas y Puma aparecieron en la escena con zapatillas deportivas que todos los jóvenes deseaban llevar. Los precios eran accesibles, y las chaquetas bomber y las sudaderas con capucha se volvieron símbolos de una juventud que desafiaba las normas establecidas.
De los grafittis en pared a colaborar con marcas de ropa:
Durante los años 80, los grafitis dejaron su marca en la moda urbana. Artistas callejeros como Keith Haring y Jean-Michel Basquiat dejaron a un lado las paredes de la calle para colaborar con marcas como Comme des Garçons. Esta fusión entre el arte callejero y la moda marcó el comienzo de una conexión duradera. Aunque los precios iban aumentando, seguían siendo asequibles para aquellos que deseaban usar estas prendas.

El crecimiento del Hip-Hop y las marcas de lujo “Streetwear”:
Con el ascenso del hip-hop en los años 90, la moda urbana se fusionó con la cultura musical. Marcas como FUBU y Wu-Wear reflejaban la estética de las calles, mientras que diseñadores como Karl Kani y Sean John llevaban el streetwear a otro nivel. A medida que la cultura hip-hop se infiltró en la moda, las colaboraciones entre artistas y marcas se volvieron algo muy habitual.
Directo a las pasarelas:
En la década de 2000, la moda urbana llegó a las pasarelas. Marcas como Supreme y BAPE llevaron el Streetwear al centro del escenario, desafiando a las famosas marcas de moda de lujo.
Las colaboraciones entre marcas de streetwear y marcas lujosas de moda, como la colaboración entre Louis Vuitton y Supreme, sacudieron la industria. Los precios subieron notablemente, lo que provocó una transformación en la percepción del Streetwear.
El Papel de las Redes Sociales y la Globalización:
Con la llegada de las redes sociales, la moda urbana se volvió más accesible y global. Marcas como Off-White y Yeezy, impulsadas por diseñadores como Virgil Abloh y Kanye West, conquistaron las redes. Los precios variaban, desde opciones asequibles hasta artículos de edición limitada con precios elevados.
La moda urbana ha pasado de ser una expresión de rebeldía a un fenómeno en todo el mundo. Desde artistas callejeros hasta diseñadores de lujo, todos han hecho que esta evolución sea posible, posicionando este estilo de vestir donde está actualmente.
Conclusión
La moda urbana, conocida como streetwear, ha recorrido un fascinante viaje a través del tiempo, desde sus humildes comienzos en las décadas de 1970 y 1980 como una expresión de identidad y resistencia entre jóvenes de comunidades afroamericanas e hispanas en ciudades como Nueva York y Los Ángeles, hasta convertirse en una parte integral de la cultura juvenil contemporánea. El surgimiento del streetwear se remonta a figuras como Shawn Stussy en Los Ángeles, cuya marca de camisetas y sudaderas capturó la esencia de la subcultura surfista y skater. Desde entonces, el streetwear ha evolucionado, influenciado por diversas subculturas como el hip-hop, la música electrónica y el arte callejero.
A lo largo de las décadas, el streetwear ha experimentado una serie de transformaciones significativas, desde la fusión del arte callejero con la moda hasta colaboraciones entre marcas de streetwear y de lujo, como la icónica asociación entre Louis Vuitton y Supreme. La expansión del streetwear a las pasarelas y su popularización a través de las redes sociales ha llevado este estilo de vestir a una audiencia global, con opciones que van desde lo accesible hasta lo exclusivo.
En última instancia, la evolución del streetwear refleja no solo cambios en la moda, sino también en la sociedad y la cultura en general. Desde su papel inicial como símbolo de rebeldía juvenil hasta su posición actual como fenómeno mundial, el streetwear ha sido impulsado por una diversidad de influencias y ha logrado trascender fronteras geográficas y sociales, consolidándose como una forma de expresión auténtica y perdurable en el mundo contemporáneo.